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Cocido de la abuela

mayo 9, 2025

El cocido es uno de los platos más emblemáticos de la cocina española, especialmente durante los meses fríos. Se trata de un guiso completo, abundante y lleno de sabor que combina legumbres (generalmente garbanzos), carnes, embutidos y verduras. Cada región tiene su variante, pero todos comparten una misma esencia: la cocina lenta, sabrosa y reconfortante.

A continuación, te presento una receta base de cocido tradicional con sus ingredientes, pasos detallados, consejos útiles y los errores más comunes que debes evitar a la hora de hacer tu receta.

Ingredientes para 6 personas.

  • 400 gramos de garbanzos secos
  • 300 gramos de morcillo
  • 1 trozo de hueso de jamón
  • 1 hueso blanco de caña (opcional)
  • 150 gramos de tocino
  • 2 chorizos
  • 1 morcilla (opcional)
  • 1 cuarto trasero de pollo o gallina
  • 2 zanahorias
  • 1 puerro
  • 1 nabo (opcional)
  • 1 patata grande
  • 1 repollo pequeño
  • Fideos finos (en el caso que quieras hacer sopa)
  • Sal al gusto y agua

A continuación te voy a explicar los pasos que debes de seguir:

  • Primer paso: En primer lugar, pon los garbanzos en remojo la noche anterior o al menos 12 horas en agua templada con un poco de sal. Esto es fundamental para que se cocinen de forma uniforme y queden tiernos.
  • Segundo paso: En segundo lugar, llena una olla grande con agua, unos 3 litros aproximadamente, y añade las carnes: el morcillo, el pollo, los huesos y el tocino. Lleva a ebullición a fuego fuerte. Cuando empiece a hervir, retira la espuma e impurezas que suben a la superficie con una espumadera.
  • Tercer paso: En tercer lugar, introduce los garbanzos en una red o malla para después poder retirarlos fácilmente y añádelos a la olla una vez el caldo haya sido desespumado. Cuece todo junto a fuego lento durante aproximadamente 2 horas.
  • Cuarto paso: Pasada la primera hora de cocción, añade las zanahorias peladas y en trozos, el puerro limpio, el nabo y la patata entera pelada. Agrega también los chorizos y la morcilla. La morcilla es mejor añadirla envuelta en papel film perforado o una malla para evitar que se deshaga.
  • Quinto paso: En otra olla, cuece el repollo cortado en juliana con un poco de sal y un chorrito de aceite durante unos 30-40 minutos. Una vez cocido, puedes saltearlo con ajo para darle más sabor.
  • Sexto paso: Para acabar, cuando el cocido esté listo, cuela el caldo y reserva. En una olla limpia, hierve el caldo y añade fideos finos (aproximadamente 60-80 gramos) y cocina según las instrucciones del paquete, normalmente entre 4 y 6 minutos.

El cocido se sirve tradicionalmente en «vuelcos» o fases:

  • Primer vuelco: La sopa de fideos, como entrante caliente.
  • Segundo vuelco: Los garbanzos con las verduras.
  • Tercer vuelco: Las carnes y embutidos.

Puedes servir todo junto si prefieres una presentación mas moderna, pero este orden clásico permite saborear cada parte del cocido en su mejor estado.

A continuación te voy a dar una serie de consejos útiles para un cocido perfecto:

  • Usa huesos con moderación: Añaden sabor, pero si te pasas, el caldo puede quedar muy graso o salado.
  • No remuevas en exceso: Sobre todo cuando estén las legumbres y la morcilla. Si las remueves mucho, se deshacen.
  • Cocción lenta, sin prisas: Es un plato que necesita tiempo. Hazlo en fin de semana o cuando tengas tiempo para disfrutar del proceso.
  • Usa una malla para los garbanzos y otra para los embutidos: Facilita la presentación y evita que se rompan o se mezclen en el caldo.

A continuación te voy a decir una serie de errores que son los más comunes al hacer cocido:

  • No remojar bien los garbanzos: Si están poco hidratados, quedarán duros incluso después de horas de cocción.
  • Cocer todo junto desde el principio: Cada ingrediente tiene su tiempo. Si pones la morcilla o las verduras desde el principio, acabarán deshechas.
  • No desespumar el caldo: Si no retiras las impurezas al inicio, el caldo quedará turbio y con mal sabor.
  • Dejar la morcilla suelta en la olla: Es muy frágil y se suele romper. Mejor cocerla aparte o con la ayuda de una malla.
  • No probar el punto de sal durante la cocción: Muchos ingredientes del cocido (como el chorizo o el tocino) ya aportan sal, por lo que es fundamental probar antes de añadir más. Si lo salas demasiado pronto, puedes pasarte sin darte cuenta.

El cocido es más que un plato: es un ritual, una reunión familiar, un recuerdo de infancia. No es solo comida, es tradición. Prepararlo con mimo es una forma de conectar con nuestras raíces y de disfrutar de una experiencia culinaria completa, de principio a fin.

Espero que esta receta os ayude a preparar un cocido delicioso, digno de una buena sobremesa de domingo. Si lo haces, compártelo con quien más quieras. Buen provecho y hasta la próxima receta.